domingo, 30 de agosto de 2015

Crítica de cine: Kaguya-hime no Monogatari

¡Hola a todos! 

Jo, cuánto tiempo, os tengo abandonados. Ni crítica de cine, ni entradas de ningún tipo... tengo una explicación pero no os quiero aburrir con mis historias. Digamos que han sido dos semanas duras e intensas en mi vida y no tenía ni tiempo ni ánimos de escribir nada, pero ya estoy mejor y de nuevo puedo dedicarle tiempo al blog. Como llevo ya un par de semanas que de crítica de cine nanai, aquí os traigo una (aunque no sea viernes.) En este caso he visto El Cuento de la Princesa Kaguya, la penúltima película de Studio Ghibli dirigida por Isao Takahata, el director de la maravillosa La Tumba de las Luciérnagas. Así que aquí os dejo esta crítica para los que tengáis ganas de verla. Eso sí, tendrá que ser en japonés, ya que no hay doblaje al castellano (los latinos tenéis suerte, en latino sí hay doblaje). 


En un bosque de bambú viven un campesino cortador de bambú y su esposa. Un día, él encuentra un extraño tallo de bambú que brilla con una luz maravillosa. Del tallo sale una pequeña niña, vestida con ropajes de princesa. El campesino se siente bendecido por los dioses y lleva a la niña a casa donde su mujer decide criarla como hija de ambos. La niña crece más y más rápido y pronto se convierte en una hermosa muchacha. A su vez, el campesino comienza a encontrar oro en los tallos de bambú y decide darle a la pequeña niña la vida de princesa que se merece. Así compra una gran casa y trata a la niña como a una princesa. La nombrarán Princesa Kaguya y muchos nobles caerán rendidos ante su belleza. Pero la joven Princesa tiene deseos que ni el lujo y el dinero pueden satisfacer. 
La Princesa Kaguya es una película de animación sobre una historia popular japonesa, cuya animación, aún no siendo de las mejores de Studio Ghibli, ni por asomo, es sorprendentemente bella y simple. Al igual que contemplar un dibujo antiguo japonés, esta historia no sería tan hermosa visualmente si no fuera por este dibujo de tonos pálidos y trazo gordo. 

Ilustración de un libro donde se narra la historia de la princesa Kaguya. 

Así aunque la película no tenga la típica animación de anime o de Studio Ghibli (si exceptuamos la de Mis Vecinos, los Yamada) a la que estamos acostumbrados, el dibujo es atrayente por sí solo. Algo diferente que yo no había visto antes y que me ha resultado muy bonito. La historia en sí no tiene más misterio que la ya conocida leyenda japonesa. Al menos yo la conocía, en muchas series de anime se hace referencia a esta leyenda de la Princesa Kaguya (desde Sailor Moon hasta Doraemon, donde hay un episodio dedicado a ella). Decir que la película puede resultar un poco larga para lo que se quiere contar, pero profundiza mucho en los sentimientos de la princesa y en la relación con los padres. No es un gran guión pero es una bonita leyenda. Creo que si esta fuese una película de anime "normal y corriente" resultaría más aburrida. La película carece de una acción determinada, ya que sólo vemos la vida de la Princesa y cómo evolucionan sus sentimientos, pero no existe un motor de la historia. Es más, el final, que es el más conocido si sabéis algo de la historia, se resuelve en apenas diez minutos, que cierto es que no necesita de más desarrollo, pero la cosa queda un poco vacía en ese sentido. No se da una buena explicación a quién es realmente La Princesa, y eso para gente que esté alejada de la historia y que no sepa un poco que esto es más un cuento para niños que una leyenda épica puede perder un poco. Es más al final de la película queda esa sensación de "cuento infantil" al estilo de El Patito Feo o La Sirenita (no la película, si no el cuento original). Aun así, como ya he dicho la animación es digna de disfrutar y es una peli tierna y con un argumento simple (aunque no necesita mucho más) que puede hacer las delicias de algunos. Y ahora vayamos a concretar cosas buenas y malas. 

Uno de esos momentos de animación muy chulos. 


5 COSAS BUENAS 
1. La animación es muy distinta a otras pelis de anime y sin duda te sentirás dentro de un cuadro japonés. Preciosa constantemente, algo nunca visto y sin necesidad de ser muy detallada es hermosa y punto.
2. Si conoces el cuento de la Princesa Kaguya te gustará, porque la simplicidad de dicho cuento lo hace bello sin necesidad de un gran argumento. 
3. La Princesa es un personaje para amar. Es como deberíamos ser todas las mujeres y es un ejemplo de cómo deberían ser las grandes mujeres japonesas. 
4. Con este cuento ambientado en un japón medieval se disfruta mucho imaginando que así vivían realmente en la antigüedad los japoneses. Ves costumbres propias de la época, los trajes, los edificios, la forma de vida... muy bonito. 
5. Si no te hace interesarte por los cuentos populares japoneses es que no tienes alma xD. 

5 COSAS MALAS
1. Tal vez demasiado larga y en ocasiones lenta. Es una peli para disfrutar visualmente, no de su argumento o su acción. 
2. Si no conoces el cuento probablemente te aburras y el final te parezca una soberana tontería. 
3. Si estás buscando otra Princesa Mononoke esta no es tu película. 
4. No esperes un final feliz, porque los cuentos orientales son muy distintos a los europeos. 
5. Hay un halo de magia inexplicable alrededor de la Princesa, que no se aclara en la película y tienes que forzar a tu mente a pensar que ella es simplemente un ser sobrenatural que está de paso por la Tierra. Nada de lo que haga deberá ser puesto en duda. Como dicen en los Simpsons "lo hizo un mago". 

Y entonces la nota que se merece esta película es un..... (tambor japonés sonando...) 

8'5/10 

Pues sí, y no se merece más porque aunque considero que es una obra maestra, una peli cuidada, hecha como un cuadro, con mimo y preocupación la historia es la que es. Es como si aquí en occidente hiciésemos una peli de Caperucita, pero con un argumento súper profundo y todo poético y un dibujo bellísimo, no dejaría de ser el cuento de Caperucita. De todas formas, como ya he dicho los cuentos orientales no tienen nada que ver con los occidentales. Hay un halo de misticismo en torno a la historia, y si la lees entera descubrirás que la Princesa Kaguya es la "creadora" del Monte Fuji (aunque eso no sale en la peli). Sí, sí, leeros la historia os sorprenderéis. 

Lalala.. felicidad extrema. 

Y ya está. Esta ha sido la crítica de esta semana. Espero no dormirme en los laureles y seguir con la actividad en el blog (siento haber estado tan ausente, de verdad, aunque seáis pocos los que leéis). Un saludo grande para todos y a disfrutar del cine. ¡Bye-bee! 




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